Notas Filosóficas Sobre la Coyuntura Política Nacional (II)

La Madurez de una consciencia política está íntimamente relacionada con el proceso total de construcción de lo social.
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(II)[1]

Estomago de clase (latinoamericana)
Consciencia de lumpen
Nacido en la basura
Comer de todo y para todos
Soberanía espiritual
Rebeldía y apetito del insecto anarco-descolonial
Para la cucaracha de KafKa


Que no vayan a tomar por verde la madurez política del partido Fuerzas Alternativas Revolucionarias del Común (FARC). El acto realizado el pasado 12 de junio por los miembros de la bancada del Partido Verde en la Cámara de Representantes (más que lo ocurrido en la en la comisión 7ma de la misma corporación), demuestra que a los nuevos inquilinos de las instituciones democráticas del Estado colombiano, más les vale  saber elegir muy bien entre sus “amigos”, ya que es mucho más letal un “amigo no muy maduro” (verde!!) que un muy bien identificado enemigo.  Nada más leal que el odio de un enemigo; este garantiza el acuerdo mutuo de que en el menor descuido se cortará la cabeza del contrario.  Cualquier cosa puede esperarse del enemigo, menos una traición de ese principio. Más vale alejarse de un “amigo no muy maduro” (verde!!) para permanecer cerca del enemigo político.
Notas filosóficas

La Madurez de una consciencia política está íntimamente relacionada con el proceso total de construcción de lo social. En ese sentido, no se trata exclusivamente de una concordancia en términos exclusivamente ideológicos, sino que envuelve la totalidad de fuentes y procesos por los cuales se legitima el poder. A veces en el propio interior del partido – en algunos de sus elementos- o el partido como tal! Son “amigos de esos verdes” que muchas veces no concuerdan sus intereses con nuestra propia forma ( y posibilidad!!) de existir. Todavía más, nosotros podemos ser esos verdes, carecer de carácter revolucionario, y, así no sólo traicionar a nuestra clase (nuestro género y raza), sino fundamentalmente a nosotros mismos.  Entonces, fue dicho por un buen académico al proceso de paz con la todavía  guerrilla del ELN (amigos o enemigos?):

La paz es un proceso dialéctico, esto es, con avances y retrocesos, y construido mediante la movilización, confrontación y acumulación. Y en la perspectiva de confortación del Sujeto de la paz como el bloque histórico del cambio, un sujeto que erija la agenda política y social de paz con justicia social (Roncancio Jiménez, 2015, p. 141).

La política es la guerra por otros medios, decía Foucault en sur cursos de “Defender la Sociedad” en el Collège de France entre 1975 y 1976, cosa que repite Josef Ramoneda en un traducido texto para el portugués por Claudia Rossi. El poder es inmanente no se expresa únicamente en el terreno puramente partidista, no se encuentra únicamente en el enfrentamiento en el interior del capitolio nacional y en las urnas y, sin embargo, se expresa ahí como su elemento (espacio) más pleno (Singular)[2].   Seuxis Pausias Hernández, el conocido Jesús Santrich, tuvo la actitud que le es propia, un revolucionario que se entrega a sus convicciones como a su vida, sabe que un buen argumento, fundado en la potencialidad de la crítica revolucionaria, es tan letal para el enemigo, como una bala o un atentado con 80 kilos de pentolita. 


Política y filosofía
La organización ha tomado una decisión, ahora el enfrentamiento, se realiza por procedimientos erísticos y, como se sabe, de las más bajas artimañas mediáticas.  Hasta ahora parecía que las FARC se concentraban en identificar bien a sus enemigos, neutralizar los ataques y seguir el camino de la construcción de PAZ y justicia social. Pero parece que no estaba pensando muy bien sobre “sus aliados”. Sin el elemento de la visión crítica no se puede elegir bien a nuestros “amigos políticos”.
Puede el «Oprimido» aliarse con el «Opresor»? Considero esta la peor situación, la tragedia de todo ímpetu por la liberación y la paz con justicia social para un pueblo y comunidad política, el declino de la utopía y el carácter revolucionario de la acción. “Los verdes” dicen: «Defendemos la Paz, no ha Santrich». Qué quiere decir exactamente esto?  Eso suena a que defienden “esa tal paz de Santos”, aquella alineada a la realización de los intereses de la oligarquía más tradicional de país y, lejos de pretender la justicia social, están más del lado de la paz con ganancia del capital transnacional. En lo material, el país vio los llamados “cartelitos” y actitudes (todavía más) cercanas al sector que pretende acabar con cualquier posibilidad de un ambiente de paz para el país; es decir, defienden una especie de paz que reproduce y da fuerza al modelo atávico de la confrontación bélica (los síntomas de un estado de nuevo ciclo de barbarie se dejan ver al repetirse la practica institucional de falsos positivos por parte de las fuerzas del ejército y el ministerio de Defensa).
Política y filosofía

En "el monte", si se quiere las cosas son más  fáciles, el Estado como aparato represor y legitimador del orden institucional que reproduce las condiciones materiales que hacen posible la injusticia social del capital (moderno colonial), se trata de un enfrentamiento de uniformes que permite identificar el enemigo político. Incluso los paramilitares  en ese campo del conflicto político vía armada, eran vistos como enemigos diferenciados dentro del marco general de la lucha contra una maquina más superior de represión.  No parece ser tan fácil en el terreno del capitolio y de las instituciones democráticas del Estado y la constitución de la Republica Colombiana. Las elecciones regionales se acercan. Y de la misma lucha política, electoral y en los espacios de participación social y política, dependerá la defensa misma del acuerdo de paz.
El lado positivo (creación de una realidad social) mismo del poder es el Estado como eje de reproducción de una determinada forma de socialidad humana. Sin una crítica del Todo (el proceso social de construcción del poder), no podremos construir una buena estrategia y táctica  y, todavía menos no lograremos establecer bien nuestras “amistades” a la hora de defender la Paz con justicia social y realizar una oposición al gobierno del Centro Democrático.  De la definición del “amigo político”, de su “madurez” en términos de la coincidencia perspectiva radical, depende directamente la propia lectura objetiva (teórica) que habrá de tener las FARC alrededor del conflicto político colombiano.
Una consecuente visión materialista del poder, no puede caer en la exclusiva idea de que todo depende de la Voluntad y no de las condiciones históricamente construidas para satisfacer las necesidades materiales de existencia[3].  Las relaciones entre lo positivo y lo negativo del poder determinan el grado de «humanidad» que podemos ver en la construcción de los modos de producción de la vida que es el ámbito propio de «lo humano». Las fuentes del poder social son los procesos intrínsecos e inmanentes al proceso de Trabajo Social en un determinado proyecto civilizatorio (esto es en un determinado momento histórico), que se entiende como forma de  apropiación colectiva de la naturaleza. El ser humano tiene que encontrarse en condiciones de poder vivir, para poder realizar la historia, tiene que tener los Medios de subsistencia que heredó de sus ancestrales en conjunción con lo que "puede hacer" con aquellas condiciones heredadas. Solo después de considerar las condiciones materiales de poder vivir en el "acontecer" histórico, es que se puede hablar de: "Consciencia" que registra el "acontecer" en el tiempo y en el espacio.
Las relaciones “Amigo-Enemigo” en la política se definen por el grado de desarrollo histórico, siendo la lucha de clases  el transcurso de esa relación. Es por ello que Marx dice (2007, p. 76) sobre la existencia del agente social como la existencia de una  personalidad condicionada, desdoblada en una corporalidad inmediata; un individuo personal, es al mismo tempo la forma concreta de presentarse la historia, la individualidad de una clase social. Las relaciones de poder están entonces contenidas en la  "Consciencia" y, gracias a esta podremos encontrar los medios por los cuales identificar los “Amigos”, puesto que ya definido concretamente que el Enemigo” es el Orden social que produce la violencia. La burguesía no es quien crea la sociedad burguesa, es esta última que permite la construcción de un sujeto Burgués:

[…] Como agente consciente de este movimiento, el poseedor de dinero se convierte en capitalista. El punto de partida y de retorno de dinero se halla en su persona, o mejor decir en su bolsillo.  El contenido objetivo de este proceso de circulación- valorización del valor- es su fin subjetivo, y sólo actúa como capitalista, como capital personificado, dotado de consciencia y de voluntad, en la medida de que sus operaciones no tienen más motivo propulsor que la apropiación progresiva de la riqueza abstracta [….] convirtiéndose así en sujeto automático […]  (Marx C.I ,2011 p. 109) 
La calidad mental de los miembros del partido verde se define por esta determinación objetiva, que en lo subjetivo, genera esa explosión que aparece como diversidad de posturas y personalidades. No todos los militantes de ese partido estuvieron de acuerdo en ese acto y, sin embargo, hay que tener claro que fue el partido como un todo que se posicionó contra Santrich. Con o sin Santrich, la paz de los verdes se define más por la determinación objetiva que por el matriz ideológico, siendo este (el matriz ideológico) la manifestación que aparece velando el orden real del acontecer. Veamos:
Desde su fundación  25 de noviembre en 2005 y el 5 junio 2007 cunado obtuvo su personería jurídica[4], el partido Verde colombiano en sus estatutos[5] se construye como una manera mental, una actitud frente al mundo, una determinada consciencia sobre la cual establecen su proyecto político como una  de opción centro. Aparece el concepto de Vida como “Centro” fundamental de la susodicha actitud mental que pretende acoger las minorías desde una postura de “centro democrático”, propuesta que consideran necesaria y urgente que se sobrepase los extremos de una Izquierda recalcitrante y una Derecha Arrogante.


 Esta es una forma particular de socialdemocracia, que nacida en Europa a mediados de la década del 70´s, se desarrolla al unísono con la nueva configuración del capitalismo internacional y, la nueva síntesis en la correlación de fuerzas políticas entre los distintos pueblos del mundo. Esta actitud política verde, es la maduración del proceso de desarrollo global del capital.
La base social de esta colectividad es en gran medida los sectores medios urbanos de la sociedad, ubicados entre las profesiones más variadas y, casi siempre con sectores con alguna tipo de formación universitaria o técnica. Su defensa del ambientalismo hace del sector juvenil uno de los grupos etarios que más aporta a la militancia de este partido, así como los sectores LGBTI y mujeres. Ahora, la actitud política verde es una forma de ese partisan que perdió la pasión política de la que habla Josepf Ramoneda (2000).
Josepf Ramoneda realiza un interesante diagnóstico sobre el contexto de esta “nueva” actitud mental de “centro democrático”. El partisan, el partidario y militante, se ha hecho Reformista (2000, p. 19). Este quiebre tiene que ver con la máxima expresión de la pasión política como el enfrentamiento del “Amigo-Enemigo” en la segunda guerra mundial y el tránsito por la guerra fría, hasta el  “fin de la historia” de la era global y neoliberal del capital.  La  política  aparece como Despolítizada, el enemigo ideológico es difuso, no es el enfrentamiento con un personaje de las mismas cualificaciones, aparece como una figura más de  bárbaro, como la manifestación de la pura irracionalidad que hay que higienizar como proceso civilizatorio; es decir, cerrándose el circulo ideológico de lo político, el enemigo es aquello que sale de modelo triunfante: el capitalismo (2000, p. 22).  La “nueva” legitimación de ese Enemigo universal, no puede ser dada sino a partir de la universalidad de los Derechos humanos; así, la construcción del enemigo se produce gracias a un principio de moralidad que juzga entre el bien- mal. De esta manera el espacio-posible de esta nueva actitud política del siglo XXI (Ramoneda escribia en 1999!) es la síntesis de esa nueva etapa del capitalismo internacional, construyendo con ello, una consciencia especifica de lo político como  actitud de “centro democrático”.
Sabido es que no es posible construir una cohesión social sin creencia (Ramoneda, 2000, p. 107) y, si bien la Actitud política verde parece ser un hábito para cuestionar el sistema de producción capitalista en los puntos de distribución económica y sostenibilidad ambiental, así como moralmente cuestiona la violación a los derechos fundamentales, lo hace defendiendo la propiedad privada y con ello la forma de “Producción” como un todo, simplemente rectificando sus desajustes ambientales (amenizando la explotación del hombre por el hombre al ponerle un sentido ambiental), en una clara evidencia de que las razones para obedecer no mudar en esencia. En ese sentido, entre el verde y el naranja del modelo económico neoliberal, existe solamente una diferencia puramente cromática, el ojo que percibe (la consciencia) ve gracias a la misma luz del capital, su postura política es de centro, parece ser tan neutral y "tibia" como la abstracción del dinero ante la carnalidad del sufrimiento diario de quienes son explotados y dominados.
Una cosa es clara, los intereses de clase en la lucha revolucionaria. Ellos, “los verdes” demuestran su coherencia, ese es el juego de la "democracia", los "progres del capital”, cercanos en algunos temas más a las oligarquía y la clase emergente narcoparamilitar, que a sus propias clases medias urbanas, son  en lo fundamental pequeña burguesía. A las FARC les es imperativo enfocarse en la relación entre Movimiento, partido y proceso económico, a la hora de seleccionar sus amigos políticos en el escenario del capitolio nacional, sin perder de vista las relaciones entre movimiento de clase y consciencia de clase, sabiendo que Clase  es una categoría  de análisis para la crítica de la sociedad burguesa, para ir de lo más concreto a lo más abstracto y de allí nuevamente a la concretud lograda por un sujeto crítico en el horizonte de una praxis revolucionaria[6].


Política y filosofía
"jamás muere un legado siempre vivo!" 

El profesor José Aricó (2012, p. 56) nos enseñó que la crítica de la ideología debe ubicarse como propedéutica del análisis de la vinculación entre el fetichismo de la sociedad burguesa y la reproducción de las relaciones de producción capitalista.  No, el partido FARC no se puede quemar con el agua tibia. Nuestros hermanos y camaradas están siendo cada día asesinados, el gobierno no da garantías y el Estado manifiesta sus mecanismos propios de acción contrainsurgente. La participación política, la posibilidad de un proyecto comunista (liberador) de sociedad, sigue siendo cercenado.
Hoy en la reunión del directorio nacional del partido se debe saber que no se puede perder la pasión política revolucionaria! Los movimientos revolucionarios radicales no pueden caer en “veganismo político” cuando de sus militantes se hace el banquete sangriento del nuevo ciclo de la violencia política nacional. Más vale alejarse de un “amigo no muy maduro” (verde!!) para identificar bien el enemigo político; el movimiento guerrillero latinoamericano ha sabido ser antropófago.
Los verdes que dicen “defender la paz sin Santrich”, la “paz sí, Santrich no”, alientan la horda del “centro naranja” del fascismo colombiano. Son tan culpables del odio creado a los militantes de las FARC que llevó al asesinato de nuestros hermanos camaradas Anderson Pérez Osorio y Daniel Esterilla, como son cómplices del orden social que posibilita la violencia en Colombia[7]. En lo personal, considero que no se puede ser “amigo político” de quienes alimentan el odio y el asesinato de mis hermanos (verdaderos amigos!!!).  Que no vayan a tomar por verde la madurez política del partido Fuerzas Alternativas Revolucionarias del Común (FARC).



Trabajos Citados:

Aricó, J. Nueve Lecciones sobre Economía y Política en el Marxismo: Curso de El Colegio de México. Edtorial FCE. México, 2012.  
Dos Santos, Th. Concepto de Clases Sociales. 1976.
Germán Roncancio Jiménez.  ¿Cómo propiciar la solución política con el ELN? El lugar de la participación decisoria e incluyente de la población. En: Negociación Gobierno-ELN: Y sin embargo, se mueve”. Editor: Victor de Currea Lugo. Bogotá Octubre 2015, p. 141.
Marx, K. LA Ideología Alemana. Venezuela: Fundación Editorial El Perro y la Rana, 2007
__________. El Capital Tomo I. Proceso de Producción. Fondo de Cultura Económica. México, 2011.
Ramoneda, J. Depois da paixao política, Trad. Claudia Rossi. Editora. SENAC. São Paulo, 2000
Read, Jason, Marx y Foucault: trabajo abstracto y poder disciplinario. Fragmento En: La micropolítica del capital. Marx y la prehistoria del presente, trad. Aurelio Sainz Pezonaga, Ciempozuelos, tierradenadie ediciones, 2016.  



[1] Dedicado a mi papá, “Gordo te amo”, sin parricidio no podría ser fiel a tus enseñanzas, el ímpetu de seguir desesperadamente su propio orgullo y construir un carácter propio.
[2] En esto no sólo concordamos con  Josep Ramoneda, sino que lo hacemos en la medida que esto implica seguir una de las formulaciones más críticas de Foucault.  Cf. Ramoneda, J. Depois da paixao política, Trad. Claudia Rossi. Editora. SENAC. São Paulo, 2000, pp. 99-100.
[3] Entendemos una diferencia con relación al concepto de Poder de Ramoneda, en términos de relación Foucault- Marx, ya que consideramos que la idea de Trabajo Abstracto permite considerar otra lectura del concepto de poder de Ramoneda y el que nosotros mantenemos. Una ampliación de esta lectura puede verse en:  Cf. (Read, 2016).
[4] Decreto 03 90 de 2007.
[6] Para ver una discusión al respecto de la clase en el pensamiento de Marx véase los análisis de T. Dos Santos quien considera esta como un elemento fundamental para la crítica teórica en el proceso político de lucha revolucionaria.  Cf.  (Dos Santos, 1976).
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